Tienen fama, dinero, largas carreras por delante y unos corazones tan grandes como sus billeteras. Tienen menos de 30 años (de hecho, todos son sub-27), han conquistado el mundo y se lo repartieron entre ellos.
Pero a diferencia de los malos de las películas, ellos quieren hacer el bien. Aunque podríamos hacer una lista infinita (bueno, tal vez no tanto), decidimos elegir a nuestros cinco bonachones favoritos de Hollywood. Aquellos cuyas obras caritativas iguala al talento que reparten en pantallas de cine o canciones pop.
Robert Pattinson: Su sangre y corazón fríos sólo existen en la saga de Crepúsculo. Fuera de la pantalla, el galán británico tiene un corazón cálido y aunque es muy reservado con la prensa, no duda en participar de campañas y prestar su nombre para buenas causas. Entre sus beneficiarios están American Foundation for AIDS Research, la GO Campaign, Midnight Mission y Stand Up To Cancer. ¿Nada mal para un vampiro, verdad?