El vampiro está muerto. O a por lo menos ahora debería estarlo. Con The Rover, la nueva película del director de Animal Kingdom, David Michod, Robert Pattinson finalemnte se ha sacudido la etiqueta de Twilight que amenazaba con definirle como actor para siempre.
En The Rover, él tiene acento del Sur profundo de América, mala dentadura y una extraña dependencia emocional a los demás. Es un papel que ha atraído algunas críticas muy positivas: El crítico Scott Foundas de Variety habló sobre ello ‘‘una actuación que redefine una carrera... que revela profundidades de sensibilidad y sentimiento’’.
Pattinson es un sujeto de entrevista relajada. Tiene una gran carcajada, y el aire de alguien que no ha trabajado todas sus lineas con antelación, pero también está preparado para explicar y explorar que le interesa. Es serio sobre su trabajo, y con ganas de hacer cine con gente que admira y respeta.
Es consciente de que está recibiendo críticas favorables por The Rover. Está contento por eso, por supuesto, dice, ‘‘porque realmente me encanta la película’’. Pero cuando se trata de su actuación, admite, ‘‘Siempre pienso en ello como un trabajo en proceso, y cada vez es frustrante, pensando en las cosas que podrías arreglar.’’
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