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El cineasta, de 61 años de edad, habló con nosotros después de la ceremonia: "Nunca había recibido ningún premio en Cannes como director y nunca había estado en el escenario. Es muy emocionante. No tenía esperanza, pero el de Mejor Director, de alguna manera, es el mejor premio. Me conmueve especialmente porque mis amigos directores lo han recibido los años anteriores: Hou Hsiao-Hsien, Edward Yang, André Téchiné ... Hay algo muy emocionante en Cannes. También hay una tensión increíble. Es lo contrario a un festival donde la gente se duerme viendo las películas. Luchamos por convicciones. Y jamás he hecho ninguna película para conseguir un consenso. Y estoy en buena compañía: Cristian Mungiu, Andrea Arnold, Xavier Dolan, y Ken Loach, nuestro maestro. Por no hablar de Jean-Pierre Léaud, quien significa mucho para mí. La mitad de este premio, en mi corazón, pertenece a Kristen Stewart: sin su energía, su talento y su imaginación, no habría rodado Personal Shopper así. La puesta en escena tiene sentido si da vida al trabajo de los actores y en esta película rodé con una actriz excepcional ".